No todo iba a ser brillos bling bling y tonalidades de piedras preciosas esta temporada. Los amantes del polo opuesto también encontrarán su sitio deco en primavera. Y es que, frente al exceso decorativo, se mantiene también el minimalismo más sencillo. Tal y como vimos hace unos días, los espacios se aligeran y despejan, reduciendo sus elementos, muebles y adornos a la mínima expresión. Todo se depura para mantener lo esencial. Es la belleza de lo neutro, lo básico y lo depurado. ¿Suena bien? Te damos algunas claves para conseguirlo.
Luz, luz y más luz. No nos cansaremos de repetirlo. Esta es la máxima más importante de la decoración minimalista. Espacios llenos de claridad y luz, tanto natural como artificial al caer la noche. Para dar mayor efecto a este factor puedes optar por cortinas blancas semitransparentes, que filtran y difunden los rayos del sol por toda la habitación.
Después de la iluminación, la madera es el segundo must de la decoración nórdica minimalista. Materiales orgánicos y naturales bien pulidos y terminados que cubren superficies como bancos, encimeras o mesas. También se puede incluir en algunos complementos y adornos (siempre con funcionalidad) que añaden un pop de color en los espacios neutros y blancos.
No solo se reduce la decoración, también los muebles y su superficie. Patas y estanterías se vuelven finas y minimalistas, creando ángulos rectos reducidos a su mínima expresión. Siguen siendo funcionales, pero ocupando el menor espacio posible. Ya nos podemos ir olvidando de los muebles de madera robustos y pesados que copaban toda la atención de la casa.
Estas rayas rectas no están solo en los muebles, si no que se han convertido en el centro de atención de la tendencia minimalista. Con bordes negros y muy angulares, nuestros hogares se llenan de marcos y líneas negras que cruzan de extremo a extremo. Mamparas de ducha, colgadores, estanterías e incluso los bordes de cuadros, espejos y otros elementos geométricos del hogar. Todo con bordes negros.
Y, por supuesto, los accesorios. Cuando todo es minimalista significa que cada elemento de la casa debe tener una función, más allá de la decorativa. Así, los adornos deco se simplifican muchísimo, convirtiéndose en elementos necesarios para la vida diaria que a su vez añaden un toque de color, textura o diferenciación. Velas, plantas o lámparas minimalistas son las favoritas para conseguirlo.
Este verano las opciones son infinitas. Si eres fan del exceso, el lujo y la exuberancia adorarás la mayoría de tendencias que están llegando esta temporada. Llenas de color, mezcla de texturas y contrastes. Pero si lo tuyo es la simplicidad, la eficacia y la funcionalidad, tampoco echarás de menos recursos. La tendencia minimalista será tu mejor aliada para mantener tu casa trendy y actual con la máxima sencillez.
¿Cuál de los dos polos será el tuyo? Cuéntanoslo en los comentarios.
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Foto de cabecera| Weekday Carnival.